El meteorólogo Alejandro Gómez ratificó la persistencia de los registros térmicos elevados. “Hoy estaremos cerca de los 39 grados con alta sensación térmica y posiblemente se incremente la nubosidad durante la noche”.
Mañana habrá “nuevamente temperaturas muy altas, aunque transitoriamente durante la mañana el viento del sudeste permitiría un pequeño alivio”. Adelantó que la sensación térmica llegaría hasta 45 grados, “considerando que la humedad no está tan elevada”.
El 31, mesa afuera, luego inestable
En la noche del viernes 31 de diciembre habrá “buenas condiciones de tiempo, con vientos débiles del noreste. En la madrugada del sábado aumentaría gradualmente la nubosidad”. En ese marco, consideró que “la tendencia” para el arribo de la inestabilidad “se está extendiendo”.
Precisó que “Paraná, Diamante y Vitoria, cerca del mediodía tendrían condiciones de inestabilidad aislada, con probabilidad de algunas lluvias y tormentas locales, nada muy significativo. Mejoría temporariamente a la tarde. Hacia la noche del sábado la inestabilidad sería más importante”. Durante la jornada habrá “temperaturas de unos 32 grados pero alta sensación térmica con alto contenido de humedad”.
Mayor probabilidad de lluvias
El domingo “persistirán las condiciones de aire cálido, con abundante nubosidad. Habrá máximas de entre 32 y 34 grados. A la noche volvería a estar inestable con mayor intensidad, con probabilidad de lluvias y tormentas más importantes”, dijo Gómez.
Y enseguida aclaró: “El proceso de inestabilidad se dará dentro de la masa de aire cálido”.
El ansiado alivio
“El alivio llegaría el martes o miércoles, con el ingreso de un sistema frontal y descenso de temperatura que sería considerable, con máximas de 30 o 31 grados”, adelantó el meteorólogo.
Lluvias
“Las perspectivas de lluvias del sábado no son importantes. En el sur entrerriano serían de 8 a 10 milímetros. El domingo podrían alcanzarse precipitaciones de 20 milímetros, a lo que podría sumarse algo más el lunes”, expresó el especialista.
Olas de calor
Finalmente, dio cuenta de que lo normal en esta zona son “tres olas de calor por temporada con persistencia de tres días, pero es poco común que temperaturas tan elevadas se mantengan por un lapso tan prolongado como el actual”